Lo más importante es la tierra. El cultivo regenerativo incluye técnicas de cultivo naturales como el biodinámico, la permacultura y la lombricultura, que son empleados para construir fertilidad en la tierra y enfatizar la importancia de la siembra local, ética y sustentable. 

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El cultivo regenerativo significa no insecticidas, fertilizantes ni pesticidas, y la seguridad de que ningún elemento foráneo sea introducido al sistema. 

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El cultivo regenerativo va más allá de la propuesta “orgánica” y “sustentable”, tiene la meta de mejorar nuestro entorno, nuestra comunidad y el medio ambiente a través de la agricultura. 

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La práctica del  cultivo regenerativo vuelve la tierra más rica, mejora la calidad del agua del sub suelo,  y lo más importante: genera productos nutritivos y de la más alta calidad. 

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Libre de todo mal es un término propio. En un mundo donde tantas cosas son dudosamente "orgánicas", nosotros simplemente les llamamos así a nuestros productos porque son 100% limpios. 

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Nuestra máxima certificación la dan los constantes clientes y amigos que nos visitan. Soliciten una experiencia o taller para conocer personalmente este espacio .